¿Has pensado a practicar el Método Pilates para mejorar tu bienestar?
Pilates llamada a su método Contrología. El mismo hablaba de la Contrología como la completa coordinación de cuerpo, mente y espíritu. Entendía que un equilibrio entre cuerpo y mente era indispensable para alcanzar la felicidad y la salud. Consideraba que la práctica de la Contrología de forma habitual llegaba a producir los cambios físicos y mentales que dan lugar a una transformación global hacia el bienestar total.
Cómo nos ayuda practicar Pilates
¿Y cómo podemos conseguirlo? A través de la concentración, estando conscientes en todo momento de la respiración, del movimiento que estamos ejecutando, de la posición, de la alineación de nuestras estructuras corporales,… Tratando de coordinar, en todo momento, la respiración con el movimiento. Activando de forma consciente la musculatura, dirigiendo el movimiento desde la mente consciente. A través de un apasionado conocimiento y una profunda comprensión de cómo funciona nuestro cuerpo. Es triste, y hablo desde la experiencia, ver que todavía hay personas que piensan que pueden llevar aire a su abdomen o que no conozcan que modificando su musculatura pueden llegar a cambiar la forma de su cuerpo y corregir su postura.
La sensación de bienestar viene a partir de sentirte bien física y mentalmente, y en esto ayuda mucho la práctica del Pilates. Si no te encuentras bien físicamente es difícil que te sientas bien psicológicamente. Si existe algún malestar físico es muy complicado sentirse bien mentalmente.
He leído mucho sobre el poder de la mente. Pero no vale solo con querer o con desearlo. Tenemos que tomar acción. El cuerpo tiene un gran poder autosanador, pero tiene un límite. No vale todo. Cómo lo tratemos es muy importante. Solo tenemos un cuerpo y una mente y son para toda la vida.
No te resignes. Busca tu bienestar.
Todavía se toma la enfermedad o el dolor físico como algo normal, considerando que son algo intrínseco a nuestra existencia. Cada vez son más habituales las enfermedades crónicas. Aceptamos que nuestro cuerpo va a vivir en modo enfermo para toda la vida. Pero más que aceptarlo, nos resignamos, lo compramos y directamente tratamos de acabar con el síntoma sin querer poner la atención en el origen. Todo esto tanto a nivel físico como mental. No hay una consciencia de prevención, de autocuidado. La educación que nos dan deja mucho que desear en este sentido. Y hay a quienes no les interesa cambiarlo.
Eres cuerpo físico, mente y espíritu. Para poder disfrutar de una felicidad y de un bienestar real estas tres partes de ti que tienen que estar alineadas, equilibradas. Tres parcelas de ti mismo, de tu ser, que tienes que cuidar y mimar. Son como tres jardines, que tienes que abonar y regar cada día. Cada uno de ellos. Los tres son igual de importantes. Es fundamental cómo alimentas tu cuerpo, de qué manera nutres tu mente, de qué forma mantienes vivo tu espíritu. ¿Qué haces para entrenar tu cuerpo? ¿Cómo lo tratas? ¿Entrenas tu mente? ¿Trabajas tu parte espiritual de alguna forma?
Bienestar físico, mental y espiritual a través del Pilates
El Método Pilates nos ayuda en ese sentido, logrando un mayor bienestar. Con su práctica habitual atiendes a tu cuerpo físico, moviendo articulaciones, activando músculos, mejorando la respiración,… Al mismo tiempo, cuidas tu mente, ejercitando la coordinación, la concentración, el control, la precisión, la consciencia,… Y esto significa que estás dedicándote tiempo a ti mismo, a tu cuidado personal, conectándote contigo mismo, experimentando el presente, viviendo el aquí y ahora, y todo ello eleva el espíritu.
Cuando empiezas con la práctica de Pilates de forma habitual, comienzas por sentir la mejora a nivel físico. Molestias físicas que tenías habitualmente se vuelven cada vez más esporádicas. Reduces el uso de analgésicos. Duermes mejor. Te sientes con más energía vital. Al sentirte mejor físicamente, pasas a sentirte mejor con contigo mismo. A nivel mental te sientes más positivo, fuerte y activo. Tu relación contigo mismo cambia y eso hace que cambie a mejor tu relación con el exterior.
Cuando el Pilates ya forma parte de tu rutina diaria de autocuidado y prevención, comienzas a sentir que se produce una conexión entre cuerpo y mente, que cada vez se vuelve más intensa, sintiendo un mayor bienestar. Empieza el despertar de tu consciencia. Comienzas por ser consciente de tu cuerpo, luego pasas a ser consciente de esta consciencia, y empiezas a vivir con esa consciencia extrapolándola a tu existencia haciéndose cada vez más constante. A esta fuerte conexión entre cuerpo y mente, se le une la conexión con tu espíritu, con tu esencia, con tu yo, como quieras llamarlo. Y es cuando tomas conciencia de la intrínseca relación entre estas tres parcelas, y la necesidad de que las tres estén bien atendidas.
Con la práctica del Pilates consigues bienestar físico y el bienestar físico es esencial para alcanzar el bienestar mental. Encontrándonos bien física y psicológicamente es más fácil vivir felices y disfrutar de la vida.
Gracias por leernos.
Son bienvenidos vuestros comentarios.
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Julio dice
Fátima, has dado en el clavo. Solo confirmar tus ideas comentando que Pilates está haciendo mucho por mí, me está ayudando más de lo que me esperaba, y como resultado me siento más joven y con más ánimo y energía.
Felicitaros tb por vuestra aportación con PC.
Fátima Pastor Andreu dice
Gracias Julio por seguirnos y por tus palabras. Nos alegramos de que te esté sentando tan bien. Testimonios como el tuyo le dan sentido a nuestra labor. Gracias.